Entradas

Mostrando entradas de 2016

Orgasmo de frontera

Por no sentirme tan acomplejada ante los conocimientos científicos de Ezequiel, le he enumerado los distintos verbos que existen en español para nombrar un orgasmo. En Cuba, por ejemplo, le dicen venirse. Ese infinitivo me gusta porque sugiere un acercamiento a alguien. Es un verbo para dos. Y bastante unisex. En España le dicen correrse. Que supone más bien lo contrario. Despegarse al final, alejarse del otro. Es un infinitivo para machos. En Argentina le dicen acabar. Suena como una orden. Parece una maniobra militar. Tengo una amiga peruana que lo llama llegar. Dicho así, se vuelve casi una utopía (y muchas veces lo es). Como si estuvieras lejos o te hiciera falta más tiempo. Su marido dice darla. Interesante. Suena a ofrenda. O, siendo pesimista, a un favor que te hacen: ahí tienes. Siendo así, tampoco me extraña que mi amiga no llegue. En Guatemala se usa irse. Eso ya es un abandono declarado. Sólo les faltaría añadir: después de pagar. En otros países dicen terminar. Frustrante.

El cantero

Siento en el lado izquierdo de mi rostro los restos ya secos de una lágrima que se formó hace un rato. Estaba sentada en la galería de mi patio, entre los arcos altos que rodean el cantero. Terminé de escribir la carta, la enrollé y escarbé lo más que pude hasta llegar casi al fondo. Miré mis uñas sucias, llenas de tierra, llenas de bronca, de dolor. Recordé esas veces que jugaba a esconder tesoros en la tierra, y años más tarde regresaba a encontrarlos. Quizás esta carta sea uno de esos tesoros... Aunque tal vez no diga cosas muy bonitas. De ellos, de todos... simplemente de lo que me rodea. No quise quemarla porque estando enterrada en algún momento quizás yo pueda comprender algo de lo que me pasaba. Una carta del presente para el futuro. De mi para mí. O para quien sea. Del pasado al futuro. En ese momento sentía vacío. Vacío de todo, de nada. La lágrima se había secado, y ya empezaba a atardecer. Sentía que debía volver. Así que me dispuse a hacerlo. Aquellas letras ya estaba

Volar.

Hay canciones que nos recuerdan a ciertas personas o lugares. Y hay otras que simplemente le dan rienda suelta al cerebro, al alma, al corazón, para crear, imaginar, sentir, proyectar... Para mí, este tema, es ÉXITO. Me emociono de escucharlo y es tan bello. (Hablo de las notas y del ritmo, la voz de Lana es incomparable y hermosa, es angelical, este éxito del que hablo cuando escucho esta canción va más allá del significado que las letras contengan) Young and Beautiful-