Suicidio

Le decía que se calmara, él la miraba, la escuchaba pero ella... Nada.
Ella, sola se ahogaba  en ese mar terrible, lleno de tristeza, de sus propias lágrimas.
Y en su interior sabía, sabía que dual era el error,
sin embargo sentía culpa, un intenso dolor..
Las fechas, las horas, quizás ya no importaban.
Quizás eran solo eso, números, tiempo que pasaba.

Un día salió a caminar, lejos de él, lejos de sí, lejos de todo.
Olvidando su gente, su pasado, sus diferentes modos.
Dejando de lado su posible futuro se había dejado envolver por la oscuridad una vez más.
Pero esta vez fue mas profundo,
su todo había cambiado, ahora era diferente.
Por amor se había arriesgado, ¡Egoísta a sí misma, tonta, inocente!

Y caminando por una calle sin ruidos se perdió.
Atardecía, se hizo de noche y no regresó.
Quizás el tiempo se detuvo, quizás no.
Pero en un segundo sin aliento,
la vida, ella se quitó.

¿Qué intentaba solucionar o qué, a caso calmar con este acto banal?
¿Creía ella en el amor verdadero, en la amistad, en la esperanza?
Quizás ni siquiera lo pensó, ni siquiera lo dudó, ni siquiera se escuchó.
Y tantos nuevos amores, que estaban esperando por ella,
se perdieron en los sueños, de quien alguna vez los espera.

Ya no se sabe de su nombre, de su historia, ya no.
Ya nadie espera por ella, nunca nadie la comprendió,
aunque él a veces recuerda, por dentro aún duele el adiós.

Ella sólo lloraba, caminaba y se perdió.
Y así en sus propias lágrimas, en su mar se ahogó.
Ya nada podrá salvarla. Ni vos, ni él, ni yo.
Ya nada podrá salvarla, ni ella misma, que huyó.


Penélope -MEC-




Es una forma de huir, o un acto de libertad.




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