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Estás en todos lados, pero a la vez, en ninguno.
Estás en todos lados, y me sonrĂo.
Una melodĂa triste suena dentro de mi,
y yo quisiera apagarla como sea.
Siento que miras desde el sillĂłn junto a la ventana.
Yo sé que te gusta ese lugar,
porque sé que te gusta observarnos
a mamá en la cocina con la tele prendida,
al papi que entra y sale, siempre con algo nuevo,
y cuando podes, y nadie te está mirando,
te das la vuelta, trepás por el respaldo del sillón
y chusmeás lo que pasa afuera, en la calle.
Te veo en todos lados, aunque hoy no estés.
Me muevo sigilosa por la casa en cada paso que doy
porque cuando veo lo que estás haciendo
quisiera ser vos, estar en ese estado relax al sol;
respirar profundo y sentir lo viva que estoy.
Aunque me acerco despacio me descubrĂs,
y parás las orejas como diciendo 'Te vi'.
Te saco una foto aunque la escena ya no sea la misma.
Movés la cola de un lado al otro,
y esa es tu manera de expresarme tu amor.
Ahora sabemos que estás tranquila,
tu partida nos llena de tristeza
pero de una inconmensurable alegrĂa,
porque nos diste TODO lo que cualquier
ser humano merece estando vivo,
creciste con nosotros y nos enseñaste mucho.
Dicen que los animales son maestros,
que en su camino nos dejan pistas
disfrazadas de flores, de cielos de colores,
de ladridos y colas en movimiento,
ultra necesarias para nuestra evoluciĂłn.
Será difĂcil verte y saber que no estás,
jugar a las escondidas ya no tendrá mucho sentido,
acostumbrarnos al silencio en casa después de llegar,
a colmar de flores tus espacios preferidos..
Noto que empieza a atardecer,
y con el sol de este dĂa triste,
se van más lágrimas, se va octubre,
se va tu esencia.
Wendy de mi corazĂłn,
gracias por la huella que dejaste,
sé feliz en el paraiso de los perros,
siempre te recordaremos.
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