Parece que va a llover

"Parece que va a llover”, leí en la notificación emergente del celular. Y esperé, ilusa, que fuera una joda. Él siempre hace lo mismo y la verdad que esta vez, no creo que se lo perdone. 

Nos hemos caído. Nos volvimos, sin saberlo, rutina. Fuimos… perdiendo el sabor. De a poco derribamos todo aquello que con tanto amor e inocencia construimos algún día. Me acerco a la ventana. Mi mirada se pierde entre las nubes grises que sí, anuncian una tormenta. Pero ya la veo venir, ya la siento, y no logro tragarla. No sé si estoy preparada para el resto. Observo que más allá de la ventana no llueve, pero más acá sí. Aquí dentro llueve. 

‘Pirici qui vi i llivir’ como si el agua fuera un ácido que nos quemara la piel hasta morir. ‘Parece que va a llover’ me dice, y cuando pasa eso, él no sale de su cueva. Y entonces unas estúpidas gotas se vuelven obstáculo para ver a su amor. Las nubes son tan grises y pesadas que no puedo ver con claridad.

Y creo que de tanto llorar, me inundé por dentro. 

Y creo que de tanta bronca, desaté la tormenta. 

Y sinceramente, ya no creo que sea su amor. 



Comentarios

  1. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

RR: Un acuerdo tácito (Relato real)

Something about us

Cómplices delincuentes